diumenge, 9 de març del 2014

La épica romana


1.               ¿Qué es la épica?

 
La épica (o epopeya) es un género poético que trata temas legendarios o históricos que tiene la intención de ensalzar a sus protagonistas. La forma de expresión habitual es la narración, aunque, es frecuente encontrar diálogos y descripciones.

Las primeras manifestaciones épicas eran transmitidas de forma oral, por tanto no tienen un autor conocido, es decir, el es pueblo quien se encarga de crearlas y transmitirlas de generación en generación, transformándolas y modificándolas con el tiempo. En Grecia eran transmitidos por los rapsodas que recitaban y los aedos que se acompañaban de la lira.

La épica nacida del pueblo es conocida como épica popular, que no deja ningún rastro ya que eran de transmisión oral.

 

La épica culta o literaria se inspira en la épica popular y nace en el siglo III a. C. en Roma. Son frecuentes las intervenciones de dioses y de seres extraordinarios en la acción, es un reflejo de la mentalidad de la época en la que surgieron las primeras épicas populares. 

 
2. Características generales de la épica latina

 

Los antecedentes de la épica latina son los siguientes:

 

a)    La épica esta influenciada por cánticos de carácter profano que pertenecen a la época preliteraria; como son “Los Carmina convivalia” (cantados por jóvenes nobles en banquetes celebrados en honor a sus antepasados.)

b)    “Los Carmina triumphalia” (burlas o alabanzas en verso que los soldados dirigían a su general, en el desfile triunfal por las calles de la ciudad, eran una forma de recordar que a pesar de los grandes logros, seguimos siendo humanos bajo la voluntad de los dioses.)

 

c)    Las “neniae” eran cantos fúnebres que se entonaban en el momento de incinerar un cadáver que pertenecía a un noble.
 

La influencia de los poemas homéricos y de la poesía alejandrina.

La épica puede basarse  bien en hechos legendarios o bien en hechos reales.

El narrador puede aparecer en la obra o no, pero no puede aparecer siempre, como en el género lírico, ni desaparecer por completo, como ocurre en el género dramático.

La narración se realiza en pasado y en tercera persona.

En la épica latina se usa como forma principal de expresión el verso hexámetro, aunque también encontramos textos épicos latinos escritos en prosa.

 En la épica es muy habitual la aparición de intervenciones divinas, que “ayudan” en el desarrollo de los acontecimientos. Por otra parte la invocación a la musas es un medio de inspiración  para el poeta, para crear un relato coherente y bien formado.

Su estructura suele estar dividida en capítulos, cantos, epígrafes…

Otra de las características es que el autor escoge el tema y utiliza los recursos estilísticos que están a su alcance.

3. Etapas de la épica latina

La primera etapa es la llamada “épica arcaica” que corresponde a los siglos III-II a.C. El autor más representativo es Livio Andrónico quien escribió en el año 240 a.C. una versión en lengua latina de la Odisea de Homero, la escribió en saturnios, que es el verso romano por excelencia. Esta obra dio a conocer en toda Roma los poemas de Homero, ejerció una gran influencia, e incluso se utilizaba en las escuelas.

Nevio es el primer poeta que escribe una epopeya nacional. A finales del siglo II a. C. publica el “Bello Punicum” que tiene como tema la primera guerra púnica en la que él mismo participó.

Por último destaca Ennio, autor que consolida definitivamente la épica latina. Su poema “Annales” se considera la primera épica nacional romana hasta la aparición de la “Enneida”. Annales era una obra sobre la historia de Roma hasta época escrita en 18 libros, de los cuales hoy en día solo se conservan fragmentos. Es tan importante porque este poeta fue el primero en utilizar el hexámetro griego como forma de expresión; a su vez, fue el creador del lenguaje épico en Roma.
La segunda etapa es la llamada “épica clásica” cuyo máximo representante es Virgilio, autor de la “Enneida”

Virgilius Maro nace en año 70- 71 a. C de origen campesino mas o menos modesto y de salud precaria. Estudió en Cremona en la escuela del “gramaticus” o maestro de la lengua. (Recibió una educación propia de los hijos de caballeros y senadores.) Continuó sus estudios en Milán y en Roma.
Adquirió una gran cultura ( letras, historia, lengua, filosofía, matemáticas, astronomía, física, medicina…) que puso al servicio de su poesía.
Fue amigo de los poetas L. Vario Rufus y de Horacio y también mecenas, consejero de Augusto.
Sus obras: Bucólicas y Geórgicas se estudiaban en las escuelas en vida del poeta.
Murió a los 52 años después de un viaje a Grecia, fue considerado y honrado como un personaje divino y tuvo una gran influencia y proyección en todo el Imperio Romano la Edad Media y el Renacimiento.
Su obra la “Enneida” fue escrita en once años del 30 al 9 a. C. Coge como modelo la Odisea y la Iliada. Esta obra fue propuesta por Augusto quien desciende de la familia de Eneas, y le sirve como propaganda militar. Cuenta los orígenes de Roma, y está dividido en doce cantos, dónde recoge la leyenda, de origen griego y conocida por los romanos, de los viajes de Eneas desde que huyó de  Troya con su padre y con su hijo Ascanio hasta que se estableció en Lacio.

Por ultimo tenemos la tercera etapa que se conoce como la Épica postaugustea se caracteriza por uno de los pocos romanos que alcanzó cierta fama como autor épico aunque su estilo no gustara a sus contemporáneos: Lucano.

Lucano perteneció, a la familia de los séneca, concretamente era sobrino de Séneca el filósofo y como él nació en Córdoba. Vivió en el siglo I d. C. Gozó de la amistad del emperador Nerón hasta que éste celoso del éxito de Lucano como declamador, tanto en griego como en latín, le prohibió leer sus composiciones en público.
Lucano participó en la conjura de Pisón contra Nerón y cuando los conjurados fueron descubiertos recibieron su castigo. Lucano fue obligado a abrirse las venas después de un banquete. Fue un autor precoz que murió joven. De él sólo nos ha llegado el poema épico, escrito en prosa, titulado Farsalia y cuyo tema es precisamente el enfrentamiento que se produjo entre César y Pompeyo en este lugar y que acabó con la derrota del segundo. Lucano publicó los tres primeros libros, de los 10 que componen el poema, el resto fue publicado tras su muerte. Lucano rompe los moldes de la épica tradicional al hacer desaparecer a los dioses de su relato. A cambio, introduce descripciones y discursos abundantes, llenos de recursos estilísticos que hacen difícil seguir el relato y terminan por agotar al lector, y episodios que nada tienen que ver con la épica como el relativo a la astrología, tema éste que, por otra parte, estaba muy de moda en la época.

 Tras la muerte de Nerón, el último emperador de la dinastía Claudia, habrá que esperar que pase la dinastía Flavia y llegue la de los Antoninos para que, con Trajano, se produzca un resurgir de la libertad de expresión y del espíritu de la Roma clásica al estilo virgiliano. Destacan entonces las obras de tres autores del siglo I d. C.
  • Las Argonáuticas de Valerio Flaco inspirada en la obra homónima del griego Apolonio de Rodas. Valerio Flaco narra en ocho libros de hexámetros, frente a los cuatro libros del autor griego, la historia de Jasón y su búsqueda del vellocino de oro. Su caracterización de los personajes de Jasón y Medea supera la de Apolonio de Rodas. Valerio Flaco invirtió veinte años de su vida en la elaboración de esta obra en la que los recursos estilísticos no son tan excesivos como en Lucano.

  • Púnica de Silio Itálico epopeya en 17 libros escritos en verso que narran la segunda guerra púnica desde el asedio de Sagunto hasta la batalla de Zama en la que el ejército romano, dirigido por Escipión, logró derrotar al ejército cartaginés de Aníbal. La crítica no es muy benévola en lo que a su estilo se refiere; se le achaca un excesivo uso de recursos estilísticos, que provocan que el relato se vuelva monótono, y una pobre caracterización de los personajes.

  • La Tebaida y la Aquileida de Papinio Estacio: La primera es una epopeya en 12 libros escritos en verso cuyo tema es la marcha de Polinices (hijo de Edipo) contra Tebas para reclamar el trono que su hermano Eteocles se resiste a cederle rompiendo el pacto de alternancia que existía entre ambos. La segunda escrita en hexámetros es una epopeya inacabada, probablemente por la muerte de su autor; por lo que se deduce del capítulo y medio que se nos ha conservado, la intención de Estacio era contar la historia de Aquiles. En lo que al estilo se refiere la Tebaida resulta una obra mucho más recargada de recursos estilísticos (metáforas, comparaciones, aliteraciones…) que la Aquileida.

 
                      Trabajo realizada por Johanna Ramírez y Miriam Silvestre